Muy pero que muy buenos días, domingueros!!!
Nada, como hoy no me ha llegado el mdv, soy tan jodidamente bueno con vosotros que aún así os lo envío con el enlace de la web abajo.
Hemos entrado ya en junio y se nota (((introdúzcase aquí un tono moderado de ironía))), qué maravilla: lluvia, más fresquito que de costumbre, truenos por media España…mejor, que luego pasa lo que pasa y me tenéis la A-4 acolapsá. Porque no os he llamado domingueros al principio de casualidad, no. Todos lo hemos sido en algún momento de nuestra vida, cuando no lo convertimos en nuestra filosofía de vida.
No obstante a ver, Filólogos y Doctores de la R.A.E., yo tengo una duda. Vale que la palabra es muy obvia: “domingueros”, del español “domingo”, del latín “Dominica”, del eufemismo “domingas”. Pues bien, los que vamos a la playa los viernes/sábados y nos volvemos el domingo, ¿también se nos puede llamar domingueros? Como nunca me ha quedado claro, he acudido a la fuente indiscutible (Google) y el resultado es el siguiente:
1. adj. Dicho de una persona: Que acostumbra a componerse y divertirse solamente los domingos o días de fiesta. U. t. c. s.
2. adj. coloq. Que se suele usar en domingo. Sayo dominguero.
3. adj. despect. Dicho de un conductor inexperto: Que solo utiliza el automóvil los domingos y días festivos. A veces se emplea el sinónimo de “mujer”. U. t. c. s.
Os juro que lo de “mujer” lo pone la R.A.E.
Bueno pues yo no estoy del todo de acuerdo con las definiciones. Yo si escucho la palabra dominguero pienso automáticamente en esto:
En ese ser, o también en esa familia más típica y tópica imposible: matrimonio con niños pequeños que aparecen en la playa con: sillas, sombrilla o sombrillas dependiendo de la cantidad de familiares añadidos (ver “Familia Premium”), nevera repleta de cervezas, sándwiches y filetes empanados de pollo fríos, sus bolsas de patatitas fritas, servilletas, la piscinita hinchable pal bebé, el pack de cubo, rastrillo y pala de plástico para los más “mayores”, las cartas, gafas de sol, bañadores más o menos horteras según el estilo familiar, camisetas de Curro, gorras o viseras de promoción (Larios, J&B, Ron Abuelo o Smirnoff, según los gustos) y protección solar en cantidades industriales.
También está la variante “Familia Premium”, que sería todo lo anterior junto con: suegra (posiblemente del marido que le fastidia más) o suegras, en cuyo caso serían palabras mayores, radio, hornillo, mini-televisor conectado a una batería portátil, mesas plegables, una figurita de la Virgen del Rocío y un conjunto de lonas para engancharlas y crear un fuerte.
Entre que todo esto no aparece en la R.A.E. y que yo quiero poder ser llamado “dominguero” aunque vaya todo el fin de semana, señores, si estáis conmigo, apoyadme en una campaña de Change.org que he iniciado para cambiar la definición en la R.A.E. porque esto no puede seguir así.
https://www.change.org/ peticion/RAE_cambiar_ definicion_palabra_dominguero
Para terminar el email, aprovecho para comentaros que la expresión “son palabras mayores” se usa actualmente para nombrar a cualquier cosa que exceda un poco de lo que consideramos razonable, pero hace siglos se empleaba para nombrar a 5 palabras que verdaderamente se consideraban nefastas e imperdonables si se decían a alguien: leproso, sodomita, cornudo, traidor y hereje. Algunos estaríais jodidos con todas, leprosos que sois unos leprosos.
Que paséis un fin de semana brutal domingueros y sed felices!