El post del viernes

El post del viernes (LXI)

Muy pero que muy buenos días, madrileños!!!

Siempre le cuento a la gente que nada más llegar a Siena en la primera ocasión de mi vida en la que iba a estar lejos de casa una temporada, mi primer pensamiento fue «mañana mismo compro un billete de vuelta a España». Que le dieran por saco a Italia y al Erasmus. Aquello no estaba hecho para mí y yo quería estar en mi casita, con mi familia y con mi cervecita Cruzcampo.

Supongo que la sensación de ahogo momentáneo fue fruto de haber dormido poco el día anterior, de llegar solo a un país donde no entendía a casi nadie, con maletones en lo alto, una huelga de trenes en Bolonia que nadie me explicaba, y 12 horas completas desde que salí de Sevilla hasta entrar por la puerta de mi casita en la Toscana. Ver ese cuarto desangelado, frío y sin nada más que una cama, una mesa y un armario me desubicaba, y mi compañero italiano con un amigo gordo fumando porros en la cocina tampoco ayudaban.

En 2017 van a cumplirse 7 años de ese momento, y os puedo asegurar que repetiría esa sensación todas las veces posibles, cual eterno retorno de Nietzsche. De hecho poco tardé en volver a hacer las maletas y aventurarme a otro año fuera (otra vez en Italia, se ve que me gustó oye). Pasé del shock inicial a la tristeza final de que aquello se acabase. Vivir independizado, sin tener que dar explicaciones a nadie, en un país diferente, con otro idioma, una ciudad que no es la tuya, conociendo gente nueva, saliendo hasta reventar el hígado, hacer planes improvisados que no harías en tu ciudad por el simple hecho de pensar «estoy fuera de casa. Es lo suyo. Es ahora o nunca».

Además de la añoranza de mis 2 años Erasmus y Erasmus 2.0, desde que volví de Pavía poco a poco se ha ido gestando en mí una sensación de desaliento. Supongo que a muchos os habrá pasado, tengáis la edad que tengáis, en algún momento: ¿qué hago yo en mi ciudad? ¿Voy a pasarme aquí el resto de mi vida? Con lo grande que es el mundo y lo pequeño que soy yo, en todos los sentidos, ¿cómo voy a desaprovechar la oportunidad de vivir fuera? Una cosa es viajar como turista, pasar periodos cortos en otra ciudad y otro país, que para mi gusto es necesario y debería ser obligatorio por Ley. Pero ponerte a vivir en otro sitio una temporada larga ya es otra cosa.

Pues aunque no sea Santiago de Chile, el 29 de enero llego a Madrid para no sé cuánto tiempo. Cambio de trabajo, espero que a mejor. Estaré viajando mucho según me han comentado, y vete tú a saber dónde me mandan de aquí a un tiempo. Pero no me preocupa: todo sea porque poco a poco el Mundo se me quede pequeño.

Que paséis un feliz fin de semana!

cuadro-madrid

9 comentarios sobre “El post del viernes (LXI)

  1. Vivir en otro país durante un periodo largo de tiempo te cambia mucho la mentalidad, es como una especie de lavado saludable de cerebro. De repente dejas de ver fronteras y te da ganas de conocer más. Vivir fuera tiene sus pros y sus contras pero por nada del mundo lo cambiaría. Saludos de parte de una asturiana en Alemania!

    Le gusta a 1 persona

  2. Sindaco!!! Come sempre bellissime parole. Ho pure immaginato te entrando in quella casa della zona di porta Pispini… Quando vai a Madrid? Alla fine non ci siamo mai visti in terra andaluza…
    Un grande abbraccio

    Le gusta a 1 persona

    1. Adriii!!! Come va magnaccio?? Arrivo a Madrid questa domenica, comincio a lavorare lunedì. È vero che alla fine non sono andato a Málaga per spaccarci neanche ti ho visto a Siviglia, ma pensa che scenderò ogni tanto quà, e la Feria di Málaga sempre sarà un oggettivo hahahaha. Dobbiamo parlare uno di questi giorni, un abbraccio grandeee!!!

      Me gusta

  3. Cómo se nota que tienes sangre gallega, Santiago. Siempre nos ha gustado, por necesidad o por curiosidad, ver mundo. Ya sabes lo que se dice: cuando los americanos llegaron a la Luna, se encontraron allí con un gallego que les preguntó ¿cómo habéis tardado tanto?

    Le gusta a 1 persona

  4. Como te entiendo…por eso vivo en otro pais, siempre pienso que será la última oportunidad, mi ciudad tengo la suerte y la desgracia que es la Capi, y siempre quiero más 🙂

    Te espera una gran ciudad, seguro que te adaptas por mucho que maldigas el metro y…que viajes mucho pues! ojalá que no sean sitios chungos, que el otro dia me dijeron que a lo mejor me toca Colombia y me acordé de ti y tu post colombiano.

    Saludos desde Copenhagen!

    Le gusta a 1 persona

    1. Jajajajaja muchas gracias Adriana (una de las danesas que creo que sé quién es) jaja. Espero que cuando bajes a tu querida capi avises y nos veamos, y también este finde antes pues espero que también jajaja.

      Un beso enorme!

      Me gusta

Deja un comentario